El jurado encargado de decidir el destino del magnate de la música Sean “Diddy” Combs lo absolvió de los cargos de asociación ilícita y de tráfico sexual, pero lo declaró culpable de trata de personas para fines sexuales.

Tras siete semanas de juicio y poco más de dos días de deliberaciones, el portavoz del jurado anunció al juez Arun Subramanian su veredicto, que representa una victoria parcial para Combs, de 55 años, y su equipo de defensa.

El jurado había alcanzado un acuerdo la víspera en cuatro de los cinco cargos: dos por tráfico sexual y dos por trata con fines sexuales. Sin embargo, el miércoles se llegó a un consenso sobre el cargo más importante, el de asociación ilícita, sobre el cual inicialmente había divisiones entre los miembros del jurado.

El juicio contra Sean “Diddy” Combs comenzó hace siete semanas tras una intensa investigación federal que reveló supuestas actividades de trata de personas y tráfico sexual vinculadas a su empresa. Durante el proceso, la fiscalía presentó testimonios de víctimas y pruebas documentales que buscaban demostrar la implicación directa de Combs en la organización de estos crímenes. La defensa, por su parte, negó rotundamente las acusaciones y argumentó falta de pruebas contundentes.

Las primeras denuncias contra Combs surgieron hace varios años, cuando ex empleadas y testigos comenzaron a hablar sobre un posible esquema de explotación sexual en la industria musical y el entretenimiento. Estas acusaciones dieron pie a investigaciones preliminares que se extendieron por varios años antes de que se formularan cargos formales, reflejando la complejidad y el largo proceso que implicó llevar el caso a juicio.