
Ecuador despliega 1.500 militares en la Amazonía tras ataque de guerrilla colombiana
Más de 1.500 militares fueron desplegados en la región amazónica de Orellana para localizar a disidentes de las FARC que mataron a 11 soldados ecuatorianos durante una operación contra la minería ilegal, confirmó el Ministerio de Defensa.
El ataque ocurrió el viernes en el Alto Punino, una zona selvática de la provincia fronteriza con Perú, donde rebeldes del grupo Comandos de la Frontera emboscaron a un escuadrón del ejército ecuatoriano con fusiles, granadas y explosivos. El gobierno calificó el hecho como un “cobarde atentado” y aseguró que la respuesta militar será contundente. “¡Nos vamos con todo! Esta guerra contra los malos se intensificará”, advirtió el Ministerio de Defensa en la red social X.
Las fuerzas desplegadas incluyen unidades de inteligencia, contraterrorismo y fuerzas especiales, que tienen como misión “localizar y neutralizar” al grupo responsable. El Ejecutivo declaró héroes nacionales a los militares caídos y ofreció una recompensa, sin monto específico, a quienes colaboren con información.

En el enfrentamiento también resultó herido un soldado y murió alias “Compadre”, señalado como comandante de la organización criminal en Ecuador. Según el Ejército, este individuo lideraba actividades de minería ilegal y extorsión, y tenía vínculos con la banda ecuatoriana Los Lobos. En la región también operan Los Choneros, Tiguerones y Comando Vermelho, este último uno de los grupos narco más fuertes de Brasil.
El Ejército colombiano se declaró en “máxima alerta” en la frontera y anunció su apoyo en la búsqueda de los responsables. Oenegés advierten que la minería ilegal en la cuenca del río Punino se cuadruplicó en 2024, junto con la presencia creciente de disidencias armadas.
La violencia en Colombia, Ecuador y Perú —una zona estratégica para el narcotráfico— continúa en aumento, agravando la seguridad en un corredor clave para el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos y Europa.