El Salvador. Una investigación publicada el 10 de abril por El País y medios aliados reveló que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, adquirió en septiembre de 2024 un terreno valorado en un millón de dólares en la playa El Flor, una zona protegida en el departamento de Sonsonate.

La propiedad, de 13,978 metros cuadrados, fue comprada a través de la sociedad Bu-Ro, registrada a nombre del propio mandatario y su esposa, Gabriela Rodríguez.

Este terreno abarca parte del parque marino Complejo Los Cóbanos, una zona clasificada como área natural protegida y también como sitio Ramsar, por su riqueza ecológica y por la presencia de especies en peligro como tortugas marinas, ballenas y aves migratorias.

La Ley General de Recursos Hídricos, promovida y aprobada bajo el gobierno de Bukele, establece que las playas son bienes nacionales de uso público y, por tanto, no pueden privatizarse. La operación plantea así un dilema legal y ético que ya genera críticas entre ambientalistas y expertos en transparencia.

Hasta el momento, no se han registrado solicitudes de permisos para construir en ese terreno, pero cualquier trámite dependería de instituciones dirigidas por funcionarios leales al Ejecutivo, dice el texto.

Esto, de acuerdo al reportaje, ha encendido alertas sobre un posible uso de información privilegiada y concentración de poder. Ruth López, abogada especializada en lucha contra la corrupción, advirtió que el caso podría configurar un claro conflicto de interés, ya que las decisiones técnicas y jurídicas recaen en funcionarios subordinados al propio comprador.

La playa El Flor, donde se ubica el terreno, no solo es un área de alto valor ecológico, sino también turístico. Su ubicación estratégica en la franja costera occidental del país y su proximidad con otras zonas en desarrollo han elevado el interés inmobiliario, aunque también han intensificado la presión sobre ecosistemas ya vulnerables.

Esta compra se suma a otras inversiones inmobiliarias realizadas por el mandatario y su familia en los últimos años. Entre ellas se encuentran una finca de 45 hectáreas conocida como Hacienda Dorada, en Nuevo Cuscatlán, y un edificio en el centro histórico de San Salvador. De acuerdo con la investigación, el patrimonio inmobiliario del círculo más cercano a Bukele ya supera los 10 millones de dólares.

Nota: esta noticia fue redactada por IA

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