Estaba llamada a ser la eliminatoria estrella de octavos y no defraudó: el PSG eliminó en los penales al Liverpool y  se metió en cuartos de la Liga de Campeones, en una jornada en la que Barcelona, Bayern e Inter cumplieron y sellaron la clasificación sin excesivos problemas.

En un Anfield predispuesto a vivir una gran noche de fútbol y la clasificación de su equipo, que llegaba con la ventaja de la victoria 1-0 lograda hace una semana en el Parque de los Príncipes, Ousmane Dembelé silenció el mítico estadio inglés igualando la eliminatoria al poco de comenzar (12).

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En un encuentro apasionante, con ritmo endiablado y ocasiones para ambos equipos, aunque sin más goles, el pase se definió en los penales: el uruguayo Darwin Núñez, que completó un partido horroroso, y el joven Curtis Jones, autor del gol en la ida, fallaron sus lanzamientos, o mejor dicho, el portero italiano Gianluigi Donnarumma fue decisivo con dos paradas.

Decisivo Donnarumma

Desiré Doué, uno de los jóvenes ‘descubiertos’ por Luis Enrique, anotó el penal decisivo para dar el pase a su equipo (4-1 en la tanda final).

Este resultado ante el líder destacado de la Premier League y el equipo que acabó primero en la primera fase de la Champions, supone un gran éxito para el técnico español y un espaldarazo a su proyecto, alejado de las estrellas que no dieron al PSG el ansiado éxito en Europa.

En cuartos se medirá a Aston Villa o Brujas (3-1 para los ingleses en la ida).

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