El legendario Ismael Miranda celebra hoy sus 75 años, siendo aún “El niño bonito de la salsa”. A pesar de su delicado estado de salud, el cantante se muestra profundamente agradecido por el apoyo y cariño que ha recibido a lo largo de su carrera. “He dado lo que he recibido”, expresó Miranda a través de su esposa, Janice Battle, quien lo asistió en la comunicación debido a su convalecencia.

Un homenaje a su carrera

A pesar de las dificultades, Miranda aún recuerda con cariño los momentos musicales que compartió con su público, quien siempre lo ha tratado con amor y respeto. Durante su carrera, el artista ha entregado su voz y composiciones, y considera que el apoyo de su gente ha sido fundamental para su éxito.

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Un derrame cerebral limita sus proyectos musicales

Miranda pudo haber celebrado su cumpleaños interpretando éxitos como ‘Así se compone un son’, ‘Abran Paso’ o ‘Señor Sereno’, pero un derrame cerebral en enero de 2021 lo dejó convaleciente. Desde ese momento, su carrera musical se vio limitada, aunque ha participado en algunas presentaciones junto a otros músicos.

Su esfuerzo por mantenerse activo

Para enfrentar las secuelas de su derrame cerebral, Miranda sigue realizando terapias físicas con el objetivo de mantenerse en movimiento y continuar vinculado a la música. A pesar de sus limitaciones, se siente respaldado por su familia, amigos y el público que no ha dejado de orar por él.

El apoyo del público a lo largo de su carrera

Desde joven, Miranda fue apoyado por el público de Nueva York, donde empezó a tocar congas con el grupo Pipo y su Conjunto. Fue allí cuando su talento llamó la atención del músico Andy Harlow, quien lo integró a su agrupación a los 15 años, impulsando su carrera musical.

Larry Harlow, su gran aliado

Después de pasar por varias agrupaciones, Miranda encontró en el pianista Larry Harlow a un gran aliado, quien lo ayudó a consolidarse como una de las figuras más importantes de la salsa. Juntos grabaron discos memorables como ‘El exigente’ y ‘Abran paso’.

Un legado musical inolvidable

Miranda no solo dejó su huella en la orquesta de Harlow, sino que también brilló como solista con discos que aún perduran en la memoria de sus seguidores. Con el apoyo de Harlow, grabó su primer disco como solista, ‘La oportunidad’, y continuó su carrera con discos como ‘En fa menor’ y ‘Sabor, sentimiento y pueblo’.